Quiromasaje

Desde un punto de vista etimológico, procede de la unión de la voz griega "κιροσ" o sea "quiros" (manos), con la voz "masaje" (amasar o apretar con suavidad). Así, Quiromasaje significa literalmente 'masaje con las manos' o "masaje manual", y se usa dicho termino para diferenciarlo de los masajes mediante aparatos eléctricos o instrumentos mecánicos. Las técnicas de masaje se establecen y aplican en función del objetivo específico a conseguir.


El "quiromasaje" es un método de valoración (mediante la palpación perceptiva) y de tratamiento manual, aplicado sobre la cubierta corporal y trasmitido por la presión mecánica de las manos a los diferentes órganos y tejidos del cuerpo humano, que tiene a la vez, efectos reguladores sobre el dolor, la sensación general de energía, los estados de ánimo, el cansancio y en general sobre la Psique. Según la indicación y los objetivos de tratamiento propuestos, se pueden lograr efectos que generan acciones directas y/o reflejas sobre el organismo. El quiromasaje en si es una técnica de aplicación manual con claras connotaciones reflejas basadas en las técnicas orientales. Mediante el quiromasaje se obtiene una mejora de la capacidad inherente de autocuración del cuerpo a la cual aluden los naturópatas y prácticantes de técnicas parasanitarias.

Los beneficios del masaje han llegado hasta nuestros días evoluciónando desde las técnicas más simples para proporcionar relajación y favorecer el sueño, hasta el desarrollo específico de algunas más complejas para aliviar o eliminar dolencias concretas del cuerpo y/o el organismo. A continuación se especifican los principales efectos :

Mecánicos: en referencia a como las fuerzas mecánicas relacionadas con cada maniobra afectan a los tejidos.

Fisiológicos-higiénicos: cuando se efectúa el masaje en una persona sana para proporcionar mayor vigor al organismo o para aliviar el cansancio y, esté se asocia a la práctica de ejercicio físico o gimnasias suaves, y/o sauna, baño de vapor o baño turco, etc.

Preventivos: se cumplen cuando se localiza y delimita por palpación una zona tensa o con posible lesión, se lo comunicamos al sujeto que recibe el masaje y si es factible se trata. Además al aconsejar que el tratamiento este unido a la práctica de ejercicio moderado, se consigue fomentar el bienestar y que el masaje perdure. Cumpliéndose así varias de las funciones del terapeuta manual: cuidar-prevenir, tratar y promover la salud.

Terapéuticos: cuando se utiliza el masaje para mejorar la función circulatoria, recuperar la movilidad restringida entre los tejidos dañados, aliviar y/o reducir el dolor, o para optimizar la conciencia sensorial. En el momento en que el masaje proporciona apoyo humano, relajación y bienestar, ayudando en la recuperación y el mantenimiento de la salud se convierte, aun sin pretenderlo, en un acto terapéutico.

Estéticos-higiénicos: al movilizar la piel se provoca un efecto mecánico de arrastre o limpieza de está, eliminando así las células descamativas. Cuando el QM tiene por finalidad mejorar el aspecto externo de la persona, eliminando los depósitos de grasa, devolviendo al músculo su tono y relajando el cansancio. Tiene resultados higiénicos puesto que al eliminar el cansancio en una persona sana produce un resultado estético.

Deportivos: cuando se efectúa para preparar a un deportista con finalidad competitiva antes, durante y después de la práctica del mismo.

Psicológicos-anímicos: el contacto de la mano experimentada proporciona calma, seguridad y confort a la persona tratada, le proporciona relajación, a la vez que regula y alivia la tensión psicofísica.

Regula la función: Basado en los fundamentos orientales y naturopáticos el quiromasaje ayuda a mejorar la capacidad de autocuración de nuestro cuerpo.

Y como bien matiza el Dr. Ulrich Storck (nº 16 de la bibliografía final): “`[...] nunca hay que olvidar que el éxito del masaje depende de los múltiples efectos indisolublemente ligados unos a otros [...]”. Efectos que generan acciones directas y/o reflejas, sobre el organismo, detalladas a continuación:

1º Directas o locales: relacionadas con la acción mecánica de la mano sobre los tejidos, son aquellas que se manifiestan en el lugar de aplicación. Por ejemplo: Calentamiento moderado por la fricción; bombeo de la circulación sanguínea; estiramiento de los tejidos blandos; despegue de los tejidos cicatrizales; colaborar en la rotura de adherencias y fibrosis; aumento de la permeabilidad entre tejidos; descarga de enzimas; mejora la elasticidad de los tejidos y favorece el deslizamiento entre ellos

2º Indirectas o reflejas: surgen a distancia del lugar de aplicación, ejemplos: Relajación; favorecer el sueño; aliviar del dolor; favorecer la microcirculación; proporcionar equilibrio del Sistema Nervioso Autónomo. Estas acciones son similares a las indicadas en otras terapias reflejas como la reflexología, acupuntura, facioterapia...

La combinación de acciones y efectos generan una respuesta sobre los diferentes tejidos y órganos, así como cambios positivos y equilibrantes sobre los diferentes estados de ánimo y de la energía. El Dr. Storck especifica aún más: "[...] Donde quiera que deba considerarse un incremento de la capacidad para cumplir las exigencias planteadas, es decir, donde se haya implantado un cierto cansancio orgánico y tisular, el estimulo del masaje es el medio curativo más eficaz [...]; y designa al masaje como "[...] regulador de la función [...]".

Podemos añadir que la suma de efectos y acciones del masaje activa así mismo la capacidad de autocuración del organismo.